My name is Karen Martínez and I am an immigrant from Puerto Cortes, Honduras. I came to the United States in October of 2018 in an exodus caravan from Honduras. My story is the story of many women. Not only am I a survivor of domestic violence, there is also terrible violence in my home country. Everyday, children are being targeted and recruited by the cartels. I did what I could to protect myself and my children, but in my country if you don’t have money or influence no one does anything to protect you. I was worried about my children’s life and future, so I made the decision to leave my country and take the hardest trip of my life to the United States. It was dangerous, long, and hard, but God was always with us. When we reached the southern border of the U.S. we were not permitted to seek asylum in the United States. Instead, we stayed for about four months there and I lived with people from all over Central America that were escaping violence, genocide, abuses and trauma.
When we decided to cross, we were detained with other people that were crossing the border. The conditions at the border are very inhumane, they kept us in a frozen cell with no water. This country’s values and morals are at risk and we need to make sure the detention and deportation of our families stops.
I found some angels on my journey that I thought I would have never met. I met Isabel, an organizer, who connected me with the Shine Together, Cleaning Co-Op. Through the co-op, I fight for a better education and future for my children. The motivation the group gives each other is like having a second family.
“Shine Together” is the new ECCO-born cleaning cooperative. We are a group of immigrant families like me that established the co-op to become economically independent. We are very proud and happy that through our work we are earning a living through cleaning homes, offices and doing catering, utilizing our skills and what we love to do. This initiative has brought up hope for resilience and liberation in this country. My hope is that there are more opportunities for immigrants and that there are more co-ops so that people across the country can have the support that they need.
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Karen Martínez
Core Group Member
Essex County Community Organization (ECCO)
Mi nombre es Karen Martínez y soy inmigrante de Puerto Cortés, Honduras. Vine a los Estados Unidos en octubre del 2018 en una caravana de éxodo desde Honduras. Mi historia es la historia de muchas mujeres. No sólo soy sobreviviente de la violencia doméstica, pero también existe una violencia terrible en mi país natal. Todos los días, los niños son blancos del reclutamiento para los carteles. Yo hice lo que pude para protegerme y proteger a mis niños, pero en mi país, si uno no tiene dinero o influencia, nadie hace nada para protegerlo. Me preocupaba la vida y el futuro de mis hijos, y por lo tanto tomé la decisión de abandonar a mi país y tomar el viaje más difícil de mi vida a los Estados Unidos. Fue peligroso, largo, y duro, pero siempre Dios estaba con nosotros. Cuando llegamos a la frontera sur de los EE.UU., no se nos permitió buscar asilo en los Estados Unidos. Más bien, nos quedamos allí por cuatro meses aproximadamente y viví con personas de todo Centro América que se habían escapado de la violencia, genocidio, abusos y trauma.
Cuando decidimos cruzar, fuimos detenidos con otras personas que estaban cruzando la frontera. Las condiciones en la frontera son muy inhumanas; nos mantienen en una celda congelada sin agua. Los valores y morales de este país están en peligro y tenemos que asegurar que paren las detenciones y las deportaciones de nuestras familias.
Encontré unos ángeles en mi viaje que nunca pensé que hubiera conocido. Conocí a Isabel, una organizadora, quién me conectó con la Cooperativa de Limpieza Brillamos Juntos. Por medio de la cooperativa, lucho para lograr una mejor educación y futuro para mis hijos. La motivación que el grupo se da entre sí es como tener una segunda familia.
“Shine together” es la nueva cooperativa de limpieza nacida de ECCO. Somos un grupo de familias inmigrantes como yo que estableció la cooperativa para hacernos económicamente independientes. Estamos muy orgullosos y contentos que por medio de nuestro trabajo nos estamos ganando la vida limpiando casas, oficinas, y dando servicios de comida y bebida, utilizando nuestras destrezas y haciendo lo que nos encanta hacer. Esta iniciativa ha introducido la esperanza para la resistencia y liberación en este país. Mi esperanza es que haya más oportunidades para los inmigrantes y que haya más cooperativas para que las personas en todo el país puedan tener el apoyo que necesitan.
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Karen Martínez
Miembro del Grupo Central
Essex County Community Organization (ECCO)
